Todo tiene su lado oscuro como decía Darth Vader (Vade retro freaks de Star Wars).
No todo vale en este mundillo del porteo y lo que no debemos olvidar es el bienestar del bebé y en consecuencia, el nuestro.
Existen unas mochilas portabebés que últimamente las estamos llamando «colgonas». Nosotros tenemos una de esas, que todavía guardo para enseñar en los talleres qué NO utilizar para portear bebés (ni ninguna otra especie animal) y que encima nos salió cara.
Nos regalaron una Baby Björn que nos pareció una maravilla – fíjate que bien!! Vamos a poder llevar a la niña viendo mundo!! –
En nuestro primer viaje a Barcelona allá por junio de 2014, #Atila (que por aquel entonces era mimosín) tenía dos meses más o menos y la llevabamos en el huevo de la bugaboo (viajar en tren no nos permitió llevar el capazo) y en la mochila que os digo.
Realmente el bebé no se quejaba y como tenía las piernecitas cortas, todavía no molestaban al andar. La última noche, estuvimos cenando en una terracita y nos olvidamos la mochila en una silla. – Qué pena! Habrá que comprar otra! Y pagando la novatada, ni comparar ni nada, compramos la misma mochilita. 100 euros del ala.
Debo reconocer que la hemos usado bastante, llevando a la niña tanto de frente como de espaldas y reflexionando un poco, igual deberíamos haber pensado que el hecho de que las piernas del bebé molesten al caminar o que llevándolos mirando al frente su postura corporal no es muy natural, no es algo que favorezca al bebé. Sin contar con que cada vez que me agachaba la niña se separaba de mi varios centímetros y acababa con la espalda «pa tirar».
De todo hay que sacar un aprendizaje. Un día, que yo ya empezaba a curiosear en este mundo del porteo pero que aquel artículo terminó de convencerme, vimos unos estudios que desaconsejaban las mochilas colgonas porque no favorecen la fisiología de los bebés (las piernas colgando, cayendo todo el peso sobre sus genitales y arqueando su espalda si los llevas de frente). Puedes ver algo de esto aquí:
http://www.centromimame.com/mochila-colgona-utilizala/
http://www.elultimokoala.com/blog/mochila-ergonomica-vs-colgona-disfrazada/
Existen por supuesto otras prácticas desaconsejadas durante el porteo que entiendo que es lógica pura para todo el mundo, pero que por mencionarlas que no quede: Fumar, tomarte un whiskazo (o seis), correr una carrera de obstáculos o nadar estilo croll 🙂
Poco a poco esas mochilas irán desapareciendo, eso está claro, para dejar paso a las ergonómicas. De hecho, puedes ver la «nueva» Baby Björn aquí, que me sigue pareciendo poco ergonómica por no decir nada. Parece que han intentado adaptarse sin conseguirlo, a mi forma de ver. Además nosotros vivimos en un barrio joven en el que hay muchos niños y debo decir que apenas he visto de esas mochilas ya. El lunes pasado sin ir más lejos me crucé con dos chicas que llevaban a sus niños en unas manducas al frente mientras yo llevaba a Irene en el mei tai a la espalda.
¿Evolución o involución? O a lo mejor es que hemos dejado de ignorar el instinto humano 🙂
¿Habéis tenido alguna de estas mochilas? ¡Contadme!
¡¡Feliz juernes!!